miércoles, noviembre 14, 2007

En buenas manos

Esta mañana, una vez más, he ido con mi madre a hacerme los análisis de sangre. (La última vez no hicieron bien su trabajo y se equivocaron a la hora de analizar lo que debían). El caso es que nada más entrar por la puerta, la mujer (Carmela) de atención al cliente me ha echado como bronca.



- mmm... CarmeN Serrano... si, aquí está. Pero hay dos... dos "serrano de luca". una CarmeN y un Albert.
- Si, es mi hermano.
- Y no está contigo?
- No.
- Va a venir?
- No.
- Y por qué pide hora si no va a venir?! (con voz amenazante).
- Cuando pidió la hora iba a venir, pero al final no ha podido venir.
- Ok. (perdonándome la vida).

Hay que tener en cuenta que a las 8 de la mañana nadie está para bromas. Mi madre y yo nos adentramos en el maravilloso mundo del ambulatorio. Nos cruzamos con médicos que bostezan sin taparse la boca. Para qué? Así da más ambientillo. Una enfermera que le habla catalán a un paciente (este no la entiende) pero ella no cambia de idioma. Para qué? pudiendo joder. El enfermero (o lo que sea) que nos debe dar el pase a la ats es como raro. va con la bata abierta en plan macarra. Se apoya en la pared en plan soy portero de discoteca y chulo playas. Repasa a las mujeres. Canta, se queja de su duro trabajo, nos grita... Todo un personaje. Hace ya muchos años que está, no lo entiendo, será el primo del alcalde. Para rematar la ats nos deja el brazo amoratado, pero al menos se ha puesto los guantes (la última vez no se acordó).

1 comentario:

pichulines dijo...

ambulatorio viene de-ambular?